El pasado miércoles 17 de enero del 2018, a las 08:25 cogimos un autobús dirección a la localidad Alicantina de Ondara.
Sobre las 9:15 llegamos a la plaza del ayuntamiento, donde nos recibió el director de la residenciad Benjamín Estrada. Nos invito amablemente a pasar dentro del ayuntamiento donde nos explico que el lugar antiguamente había sido un convento de frailes y la actual residencia (continua al ayuntamiento)era el hospital de pobres que regían los propios frailes. Aunque estaba reformado , la estructura aun conservaba la original y eso le daba un toque rustico y acogedor muy bonito.
Luego nos trasladaron hasta la casa de la cultura, donde primero vino Paqui la psicóloga del centro, donde nos explico que trabaja 6 horas semanales, sus funciones y demás, luego llegaron Sonia y Silvia que eran la coordinadora de auxiliares y la fisioterapeuta y Pascual el doctor.
Sonia nos contó que ella se encargaba de levantar a los más dependientes, de los horarios de las demás auxiliares y demás. Mientras que Silvia nos comento los ejercicios y la rehabilitación.
Luego Pascual nos comento que ellos mismo extraen la sangre a los usuarios y demás pruebas para evitar los traslados a los hospitales al menos que sea algo muy necesario.
Nos falto conocer a la TASOC que era uno de sus días libres.
También nos dijeron que una vez al mes si los usuarios lo pagan de su bolsillo tiene servicio de podo logia y peluquería.
Para finalizar en la casa de la cultura hablo el director que nos comunico que era una residencia con Patronato, que es la Generalitat quien lleva las plazas , que solo dan a personas con un 3º grado de discapacidad y nos invito a ver los convenios de lo que cobraban los trabajadores.
De la casa de la cultura nos fuimos a la residencia, el complejo era "pequeño" pero muy acogedor e intimo. Consta de 3 plantas, en la planta baja se localiza la entrada, el comedor con las cocinas, una salita de estar y el salón donde se reúnen todos los usuarios para hacer las actividades. Luego en el segundo piso estaban las habitaciones, un baño especial con una gran bañera para relajar los músculos y demás, la enfermería y luego otra salia de estar.
Para finalizar en el sótano estaba el gimnasio donde se hace la rehabilitación y a la vez el taller de pintura de una de las usuarias, el jardín y la lavandería.
Antes de irnos pudimos interactuar con los usuarios, los cuales mostraron una gran satisfacción con la residencia y con que fuéramos a visitarlos.
Fue una bonita experiencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario